SPARTATHLON 2010

Ha finalizado este hermoso y sacrificado proyecto, que tan motivados nos ha tenido a todo en los últimos meses.
Quiero terminar este diario que he decidido escribir en este proceso, en primer lugar dando GRACIAS A DIOS por todo lo que nos ha dado y nos ha permitido disfrutar. Estoy plenamente satisfecho por lo que hemos logrado, la siembra fue muy grande, pero la cosecha no tiene comparación.
MAURO TABITTA termino la carrera con una marca de 31’ 38”, esto es BRILLANTE, quedara en la historia como unos de los cinco argentinos que históricamente han terminado esta prueba tremenda, siendo la de Mauro la segunda marca nacional de todos los tiempos. Realmente lo hecho por MI AMIGO, Mauro Tabbita es sobresaliente por donde se lo mire, la tarde anterior a la carrera le dije que en las posibilidades de máxima para él, estaba la de batir ese record nacional, y con una cabeza impresionante nunca se conformo con llegar, siempre lo busco, incluso en los peores momentos de la competencia. Mauro quedo 24 en la clasificación general de los 128 que llegaron a la meta, de los 400 que largamos. Lo de Mauro es brillante, ejemplar y merecido. Ha trabajado con una dedicación sin igual, haciendo todo al pie de la letra y respetando todo el tiempo mis indicaciones, estoy hinchado de orgullo de tener un ATLETA como él. Estoy plenamente feliz por lo que consiguió, se lo merece mucho. Mauro es una persona callada, que no habla más de la cuenta, reservado y muy buen amigo de sus amigos, es una persona que ha sabido tener sufrimientos grandes en su vida, pero jamás va por el camino dando lastima o quedándose con lo triste en su cabeza, seguramente esto también le habrá ayudado en este Spartathlon que es una carrera tremenda, sin igual, y dura por donde se la mire. Mauro pasa con esto a la historia grande del ultrafondo nacional y pone a nuestro equipo también en lugar de privilegio en el ULTRAMARATON.
Los demás también hemos dejado absolutamente todo lo que teníamos en el desafío, lamentablemente no pudimos llegar a los pies de Leonidas pero estamos muy tranquilos de haber puesto lo que había y mas también. Jorge culmino en el kilómetro 138, Marcelo en el 189 y yo en el 206, los motivos son diversos y los que me conocen saben que odio las excusas y la verdad es que todo lo que podamos decir suena como tal, por eso simplemente cada uno llego hasta donde pudo. Lo importante es que estamos muy bien y que sin dudas nos sentimos ganadores, como se debe sentir también el grupo completo. En esta carrera se valora cada kilometro hecho de una manera impresionante, son pocos los que terminan y las estadísticas no fallan, sabíamos que esta era una de las posibilidades, por esto también es tan difícil trabajar para esta carrera, como lo he escrito antes aquí las posibilidades de culminar son muy bajas. Fuimos 8 argentinos los que participamos, llegaron dos, fuimos cuatro marplatenses llego Mauro.
Estamos muy contentos, el viaje fue maravilloso, la carrera será inolvidable y la amistad que hemos forjado seguramente perdurara en el tiempo, son estas las cosas verdaderamente importantes que tiene el deporte. Estamos muy felices y lo más bello es que fuera de todo egoísmo sentimos lo hecho por Mauro como propio, fue un trabajo en equipo, con la coronación de uno de nosotros, nos sentimos todos triunfadores, y esto es real y legitimo.
Por supuesto queremos agradecer a todos los que nos ayudaron, nos acompañaron y nos bancaron en este proyecto, familiares, compañeros de trabajo, amigos y todos los que de una manera u otra colaboraron para que podamos cumplir nuestro sueño.
En lo personal, debo decir que mi meta era llegar y no pude, pero siento que con todo este hermoso emprendimiento ha sido muchísimo lo que he recibido, estimo mucho más de lo que esperaba. Y que esperaba?... Completar el recorrido…, esto no me toco, pero en cambio he recibido un calor y un cariño de la gente que me hace muy bien, estoy rodeado aquí de amigos verdaderos que me quieren y me cuidan. He puesto como entrenador, a mi mejor mensajero frente a Leonidas, avisándole que en cualquier momento intentare nuevamente visitarlo en persona. No estoy vencido, he quedado en el camino en dos bellas y duras batallas, pero aun estoy vivo para la próxima, no sé cuándo será, pero estoy seguro que algún día lo volveré a intentar. Estoy fortalecido por el cariño de los que me acompañan y por el amor de mi familia y bendecido por todo lo que me toca vivir. Dios quiso que esta hermosa historia casi termine así, y digo casi termine porque lo mejor está por venir…
Pablo Silguero
Profesor y Corredor, Tal vez algún día Spartathleta

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